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Unexpected Frequency

Summary:

Para alguien que lo oye todo, el silencio puede ser un descanso. Pero ¿y si el silencio viene con un ritmo pegajoso, lopenings de anime y ocasionales jingles de comerciales? Cuando una nueva estudiante se transfiere a la clase de Saiki, su mente resulta completamente ilegible. ¿La razón? Es como una emisora de radio: nunca deja de sonar música, y él no puede desintonizarla. Esto no puede ser buena señal.

Notes:

Hola, advertencia para todos, esta es una idea original mía, sin embargo me apoyo en la IA para errores de ortografía, coherencia y demás, siento que no hay suficientes historias de Saiki x Lectora, entonces aquí está mi granito de arena, actualizaciones cuando la universidad me deje respirar, capítulos cortos.

Chapter Text

Mi nombre es Saiki Kusuo.
Soy un psíquico.
Y estoy cansado.

No importa cuánto intente mantenerme en segundo plano, el universo encuentra la manera de lanzarme al caos. Normalmente ese caos se llama “Nendou” o “Teruhashi”. Pero hoy el caos viene con un openning.

🎶

—¡Clase! Tenemos una nueva estudiante. —El profesor suspiró como si ya se resignara al desorden que vendría—. Por favor, preséntate.

Entró una chica de cabello castaño claro, ligeramente despeinado como si acabara de bajarse de un tren en movimiento. Llevaba los audífonos colgando del cuello, decorados con calcomanías. Sonreía como si estuviera disfrutando un chiste privado.

—Hola, soy Hanamura Aiko. Espero llevarme bien con todos.

Y entonces, ocurrió.

"Laaaaa la la laaa~♪ Kimi no tame ni~ boku wa~…"

No.

Eso no vino de su boca.

Eso vino de su mente.

Una canción. Completa. Voz principal, coros, instrumento por instrumento.

Como si su cerebro estuviera transmitiendo en vivo un concierto al que nadie más fue invitado… excepto yo.

Intenté leer sus pensamientos.

"Zenzenzense kara boku wa~ kimi wo sagashihajimeta yo~"

No hay pensamientos verbales, ni frases estructuradas. Solo una playlist infinita de J-pop, openings, vocaloid y ocasionalmente… jingles de snacks.

Nunca en mi vida había encontrado a alguien así.

Mi telepatía no funciona con ella.

Peor aún.

No me deja escuchar nada más.

—Hanamura-san, siéntate allí, delante de Saiki —dijo el profesor.

Por supuesto.

Obviamente.

¿Dónde más iba a sentarse el fenómeno musical andante?

Se dio vuelta con naturalidad y me sonrió.

—Hola, Saiki-san. Me gusta tu color de cabello.

"Yume no naka e~ yume no naka e~"

Qué... agradable.

🎶

Intenté varios métodos durante la mañana.

  1. Leer pensamientos rápidos: Nada.

  2. Detectar emociones a través de ondas cerebrales: Solo encontré compases en 4/4.

  3. Buscar recuerdos visuales o ideas flotantes: Me encontré con un videoclip mental de ella bailando con patitos animados en pixel art.

Inútil.

Ella no piensa. Ella canta.

En el descanso, se unió a Yumehara y Kaidou.

Los tres hablaban animadamente, mientras yo fingía leer un libro.

En su cabeza sonaba un cover acústico de Cruel Angel’s Thesis. Lo peor: era bastante bueno.

¿Por qué su mente reproduce versiones completas de canciones? ¿Tiene una habilidad psíquica involuntaria? ¿Es un glitch en la Matrix? ¿Spotify Premium fusionado con alma humana?

"Watashi wa tenshi no... THESIS~!"

—Saiki —dijo Aiko, de pronto, asomándose por encima del respaldo de su silla.

Su rostro estaba a pocos centímetros del mío.

Sus ojos eran grandes. Luminosos.

Y su mente, en ese instante, sonaba a lo lejos:

"Gotta catch 'em aaaaall~ Pokémon!"

—¿Quieres un caramelo?

Silencio.

La clase entera volvió la cabeza.

Teruhashi se tensó como una cuerda de violín.

Kaidou miró a Aiko como si acabara de activar un evento secreto.

Yo la miré.

Ella sonrió.

Le tendí la mano.

Me dio uno sabor uva.

"Umeboshi no uta~ umeboshi no uta~"

Por primera vez en años… me sentí curioso por alguien.

🎶

Durante todo el resto del día mantuvo una canción tranquila sonando en su mente. Sin letra. Solo una melodía instrumental.

Y me descubrí siguiéndola con el pie.

Un poco.

Solo un poco.